ICÓNICA SEVILLA FEST

Esta nueva cita en la agenda cultural de la ciudad, en forma de ‘festival boutique’, ofrecerá al público experiencias holísticas, únicas e irrepetibles, en las que disfrutar de la mejor música en directo, de la mano de artistas de primer nivel en un entorno patrimonial de espectacular belleza, tan emblemático y universal de la ciudad como la Plaza de España, donde la luz y el carácter de Sevilla son protagonistas.

Zucchero

Adelmo Fornaciari nació en Roncocesi (Reggio Emilia)  el 25 de septiembre de 1955. Posteriormente se trasladó a Forte dei Marmi, en Toscana, donde formó sus primeras bandas de rhythm and blues entre 1970 y 1978: Le Nuove Luci, Sugar & Daniel y Sugar & Candies. En esa época ya era conocido como Zucchero, apodo que le había puesto una de sus maestras en el colegio.

En 1983, grabó su primer álbum de estudio titulado Un Po di Zucchero. En 1984 viajó a San Francisco para visitar a Corrado Rustici, quien le presentó a Randy Jackson. Zucchero regresó a Italia en 1985, con su nuevo grupo formado por Randy Jackson en el bajo, Corrado Rustici en guitarra, Walter Afanatieff en teclados y Giorjo Francis Perry en la batería. Participó en el Festival de San Remo con la canción “Donne” (Polygram) y luego editó Zucchero & The Randy Jackson Band. Un año después publica su siguiente álbum, Rispetto,  que ocupó rápidamente los primeros puestos en las listas de éxitos musicales tras su lanzamiento y  se presenta nuevamente en el Festival de San Remo, donde triunfó con la canción “Canzone Triste”.

En 1987 grabó Blue’s, junto a Corrado Rustici y David Sancious, con la colaboración de Clarence Clemons y The Memphis Horns. En Italia el disco vendió más de 1,3 millones de copias, convirtiéndose en el mayor éxito comercial de la historia para un álbum de rock en ese país.

En 1988 compuso dos canciones para la banda sonora de la película Snack Bar Budapest, dirigida por Tinto Brass. Ese mismo año Zucchero grabó una nueva versión de “Dune Mosse” con Miles Davis.

En 1989 Zucchero lanzó su quinto álbum, Oro Incenso e Birra, con la colaboración de los músicos que habían grabado el disco Blue’s y la participación especial de Eric Clapton, cuyo solo de guitarra convirtió a “A Wonderful World” en una verdadera joya musical. Solamente en Italia se vendieron más de 1,7 millones de copias de este álbum, superando así el récord establecido por Blue’s. Después del lanzamiento del disco, Zucchero inició una gira con Joe Cocker y Miles Davis.