José María Córdoba expone en el Museo de la Ciudad su nuevo proyecto “Odiseo”, formado por 40 obras de mediano y gran formato.
Dos clásicos de la literatura universal como la Odisea de Homero y el Ulises de Joyce son la fuente de inspiración para esta colección, pero no como ilustración de los textos sino como una obra paralela
José María Córdoba es licenciado en Bellas Artes, Primero de su promoción y Premio Nacional Fin de carrera. Entre sus galardones es Primer Premio de Dibujo de la Dirección General de Bellas Artes y Primeros Premios de Grabado del Certamen Andaluz de Artes Plásticas y del Ateneo y Universidad de Málaga. Esta especialidad, el grabado, es otra faceta del artista como docente, ya que lleva más de treinta años impartiendo clases en la Casa de la Cultura de Fuengirola para la formación de nuevos grabadores. Su obra ha sido expuesta en numerosas capitales como Paris, Copenhague, Berlín, Ámsterdam, Barcelona y Sevilla, habiendo realizado una exposición antológica en el Museo Municipal de Málaga.
No solo se expresa Córdoba en la pintura y el grabado también realiza esculturas en bronce y proyectos urbanos como el monumento a Hans Christian Andersen en Málaga o la escultura paisajística El bosque del arco iris en el Parque del Sol de Fuengirola.
Por otra parte, la pintura de Córdoba es un repertorio de diferentes registros, como si de un collage de técnicas, temáticas y estilos se tratase: cubismo, pop, surrealismo, abstracción informal y geométrica, naturalismo y realismo, pintura de historia, Historia de la pintura, deconstrucción, lenguaje del comic y la publicidad, etc… Todo lo cual por su riqueza de matices y heterogeneidad se hermana con la compleja diversidad que se pone de manifiesto en el texto de Joyce. Un texto que es sintomático del espíritu transgresor y moderno de las primeras décadas del siglo pasado. Ulises como paladín de la modernidad, un personaje que ya por entonces se comportaba más como un antihéroe que como un héroe.