The Jam-Tonic comenzó en un bar, con la idea de montar una ‘jam session’ en la que todo el mundo tuviera cabida, independientemente de su experiencia o del tipo de música que le gustase. Después más de 300 sesiones de música en directo, varios libros con más de 1500 canciones, tres discos publicados y unos cuantos festivales, mantienen intacto ese espíritu cada martes en Gallo Rojo.