La religión en el Antiguo Egipto resulta difícil de entender tal y como hoy es concebido el término. Sin entrar en planteamientos filosóficos, en general la religión se basa en creencias conectadas unas con otras y en una concepción fundamental de la divinidad. Pero en el antiguo Egipto no se puede hablar de creencias, sino más bien de cultos, y fundamentalmente de cultos locales. Las creencias se centraban en la adoración de múltiples deidades, que representaban varios aspectos de la naturaleza, simbolizando ideas y funciones de poder, expresados por medio de complejos y variados arquetipos.