Ser un outsider es vivir en el afuera, en los márgenes de la convenciones, deshabitar el sistema arte más tradicional, los beneficios (y los abusos) de las grandes galerías y museos. Es una toma de distancia de todo esto con todas sus consecuencias, buenas y no tan buenas. La galería Zunino presenta con esta exposición una muestra completamente heterogénea de artistas que se atreven a ir campo a través. Por necesidad o por convicción, de manera transitoria o como propio estilo de vida.
Y lo hace por tercera vez, por tercer año consecutivo, demostrando que siguen existiendo otras formas de exponer y vender fuera de las lógicas que rigen el establishment galerístico, expositivo y comercial de la ciudad. Un total de 96 outsiders de todo género y condición bajo todo tipo de lenguajes que pasan a habitar el afuera desde el epicentro de Sevilla.