Exposición individual de Fabrizio Arrieta.

Primera exposición en España del artista costarricense Fabrizio Arrieta (1982). Fabrizio Arrieta  (Costa Rica, 1982) es un fiel representante de la cultura visual contemporánea, partidaria de la re-interpretacion, re-utilizacion y post-producción de las imágenes. Cree en la revision historica de la tradición pictorica occidental, como un intento de ubicar la pintura en un momento y contexto determinado. Vive y trabaja en San José, Costa Rica.

Se presentan una decena de pinturas en pequeño y gran formato, en acrílico sobre lienzo, realizadas todas ellas durante el presente año y creadas ex profeso para el espacio de la galería marbellí. El trabajo de Fabrizio Arrieta entiende la identidad personal como un valor inestable transmitido por muchos factores que revelan el impacto de los medios de comunicación en la construcción, la metamorfosis y el control de nuestra propia identidad. Como punto de partida, Arrieta usa imágenes cotidianas de revistas de moda y otras redes sociales. Estos son, hasta cierto punto, el reflejo de nuestros tiempos: cómo actuamos y nos relacionamos entre nosotros gracias a internet y sus efectos sobre la estética, la cultura y la sociedad. Arrieta se apropia completamente de estas imágenes y sus formas humanas para modificarlas, rasgarlas, distorsionarlas, arañarlas, oscurecerlas, corromperlas y astillarlas para crear nuevas referencias que nos lleven a generar más preguntas, en lugar de darnos una respuesta. El proceso es una constante experimentación donde conviven fragmentos de diferentes lenguajes, los cuales previamente y posteriormente se cortan, editan, pintan para luego volver a replantear el resultado, aplicando el concepto de post-producción.

Centrándose en la técnica, la estructura y la composición, el artista ofrece un trabajo incisivo y seductor a primera vista, pero cuyos juegos perversos desencadenan una curiosidad que nos persuade a buscar “otra” imagen y su narrativa subyacente. Sus pinturas renuncian a la idea de totalidad, evidenciando los fragmentos y los medios que participan en el proceso de cortar, dibujar, pintar y editar. De esta manera, Arrieta ofrece al espectador algunas pistas sobre su exploración de la pintura y sus conexiones con la Historia del arte. Arrieta trabaja con elementos reconocibles, pero la extrañeza de las formas, así como la combinación y distorsión de las figuras, tocan los límites de la abstracción, transformando lo reconocible en algo más significativo, inquietante y conmovedor.

El resultado parte del comienzo de la apropiación, surgida a fines de los años setenta, cuya intención era poner en escena antes que la representación misma, los procesos a través de los cuales esta obtiene su codificación social.“Cortar y pegar” material de diversas fuentes relacionadas con el modo pero donde se revelan aspiraciones de transformación, manipulación y presentación de “lo bello” da una nueva lectura a las imágenes ya manipuladas, dirigidas hacia la pintura misma y sus dos grandes vertientes históricas: el arte figurativo y la abstracción, siendo el acto de pintar un evento permeable y reflejo multidireccional de la actividad mediática y artística incesante de nuestra época.